Las organizaciones agrarias ASAJA y la italiana Coldiretti, entre otros, han lanzado una Iniciativa Ciudadana Europea con el objetivo de garantizar una información clara sobre el origen de los productos alimentarios que se comercializan en el mercado comunitario. La propuesta, abierta a la recogida de firmas hasta el 21 de septiembre de 2025, reclama la inclusión obligatoria del país de origen en el etiquetado de todos los productos, incluidos aquellos importados desde terceros países.
La iniciativa también plantea que cualquier producto que acceda al mercado europeo respete las mismas normas medioambientales, sanitarias y laborales exigidas a los productores europeos, con el fin de preservar la salud pública, la seguridad alimentaria y la sostenibilidad del sistema agroalimentario comunitario.
Para que la Comisión Europea se plantee tomar medidas, es necesario alcanzar un millón de firmas y cumplir los umbrales mínimos de apoyo ciudadano en al menos siete países de la UE. Hasta la fecha, se han recogido 267.650 firmas, de las cuales 257.765 proceden de Italia, país que ha superado su umbral mínimo casi por cinco veces.
En contraste, en España solo se han registrado 1.054 firmas, lo que representa el 2,4 % del mínimo exigido, fijado en 43.920 apoyos. En el resto de países miembros, la mayoría no alcanza ni el 1 % de sus respectivos umbrales nacionales.
ASAJA ha hecho un llamamiento para movilizar a agricultores, consumidores y ciudadanos, con el objetivo de reforzar la transparencia en el etiquetado y evitar la competencia desleal de productos que no cumplen los estándares comunitarios.
Ya llevamos muchos años dándole vueltas a esto del origen. Cuando no existía el transporte y el comercio internacional era fácil saber el origen porque todo el proceso se hacía en una zona próxima. Hoy en día es muy difícil saber cuál es el origen.
Para muestra, un ejemplo:
Vamos a suponer el caso de un cordero que nace en España. A los 7 días se desteta y se lleva a Italia donde se le amamanta con leche artificial hasta los 45 días. En ese momento se lleva a Alemania donde se le ceba hasta que tiene los 23 kg. Llegado este momento se traslada a Países Bajos donde se sacrifica y eviscera. Realizado ese proceso se lleva en camión frigorífico a Dinamarca donde se despieza. Posteriormente se lleva a Irlanda, donde se hacen los filetes y se envasan en bandejas. Ya envasado se llevan esas bandejas a Francia, donde las adquiere el consumidor final.
Con todo este proceso, utilizado como ejemplo, surge la gran pregunta: ¿CUÁL ES EL ORIGEN?