El mercado del porcino está equilibrado y los precios han repetido en la mayoría de las lonjas. Los numerosos días festivos de mayo han aplazado los sacrificios. Los excedentes no son significativos y la oferta disponible es suficiente para satisfacer las necesidades actuales de los mataderos.

En Alemania, los precios de la carne de cerdo han repetidos por doce semanas consecutivas. Durante los festivos de mayo, las temperaturas han sido benignas y han favorecido la demanda de las piezas para barbacoa. El precio ha repetido por la bajada de las temperaturas y el día festivo del 30 de mayo.

En Bélgica, el precio esta semana ha mantenido la subida de 2 céntimos registrada en la semana 20, que pudo atribuirse a la anticipación de los mataderos que temen quedarse sin cerdos, mientras que las exportaciones de lechones (particularmente a España) en los últimos meses han reducido significativamente la oferta de los mataderos.

En Francia, el precio se ha mantenido. La actividad en la zona de Uniporc se mantiene ligeramente baja desde principios de año en comparación con el mismo período de 2023.

En España, el precio también repite. La demanda de los mataderos sigue siendo fuerte y los pesos, elevados pero estables. Buen ritmo de la demanda interna mientras que las exportaciones no tienen dinamismo.

En Italia, el precio sigue una tendencia contraria a la de otros países europeos. El precio ha caído 2,7 ct/kg.

En Estados Unidos, el crecimiento de los precios se ha desacelerado en las últimas semanas. Los sacrificios continúan actualmente su tendencia a la baja. Desde principios de año, los sacrificios acumulados se han mantenido bastante estables en comparación con 2023. El peso se ha mantenido sin cambios durante unos tres meses, a diferencia del año pasado, cuando empezaron a disminuir a mediados de abril y cayeron bruscamente en junio debido a a los elevados costes de producción.

En China, el precio del cerdo a 22 de mayo fue de 2,03 €/kg vivo. El precio está subiendo pero los analistas creen que el aumento de las temperaturas podría desacelerar el consumo, que junto con las elevadas existencias podría desembocar en fluctuaciones en el precio a medio plazo.