La pasada semana, Tailandia confirmó dos casos de gripe aviar después de más de un mes sin que se hubiera detectado ningún caso. Ahora hay sospechas de nuevos casos en la zona norte del país, en explotaciones que con anterioridad ya tuvieron la enfermedad.

Los casos confirmados se localizan en las provincias de Ayudhaya y de PathumThani, con casi 27.000 aves susceptibles en total.

El foco de la provincia de Ayadhaya fue descubierto en una explotación de ponedoras con un sistema moderado de bioseguridad. Las aves estaban en galpones ventilados edificados por encima de estanques piscícolas. Se había instalado una red a prueba de aves y se aplicaba desinfectante en los vehículos y las bandejas de huevos. Las ponedoras eran de edades mezcladas (34-38 semanas y 74-78 semanas) y se mantenían hasta cuatro aves por jaula.