10 de enero de 2004. La Ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación ha defendido en Lebrija, en el acto de conmemoración del 25 aniversario de la Cooperativa “Las Marismas”, el cooperativismo como una fórmula muy adecuada para el futuro del campo español.

Elena Espinosa ha manifestado que es necesario hacer unas cooperativas más fuertes y eficientes ya que son un vehículo imprescindible para el mantenimiento de las rentas de los agricultores.

La Ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación ha destacado, además, que las cooperativas no se deslocalizan y generan empleos de calidad y de ejemplo en la relación laboral con los trabajadores y, en consecuencia, su papel transciende lo exclusivamente comercial.

Elena Espinosa ha afirmado que el cooperativismo permite crear un valor añadido que se queda en el medio rural y por ello el Ministerio que dirige desarrollará un Plan Estratégico del Cooperativismo Agrario, de ámbito estatal, para impulsar la concentración y el crecimiento en dimensión económica y la apertura hacia nuevos mercados de las cooperativas agrarias.

La Ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación ha subrayado, asimismo, la excelente sintonía entre su Ministerio y la Junta de Andalucía, así como los retos que tendrán que superar la agricultura española y andaluza en los próximos años.

En este sentido, Elena Espinosa ha recalcado que, ante el hecho consumado de la PAC, las decisiones que su Ministerio ha tomado se dirigen a mantener la actividad y a apostar por el agricultor que vive realmente de la agricultura.

Así, se ha introducido una distribución de renta que favorece al agricultor profesional frente a otros “usuarios” del campo, con el máximo consenso posible, y aprovechando los instrumentos de la PAC para conseguir un relevo generacional que, en su opinión, es imprescindible.

Por último, la Ministra de Agricultura, Pesca y Alimentación ha destacado el desafío que supone adaptarse al cada vez más complejo mercado agroalimentario al tiempo que manifestaba su convicción de que, haciendo un esfuerzo en calidad, diversificación y servicios y con el apoyo del MAPA y de la Junta de Andalucía, la agricultura andaluza tiene ante sí un gran futuro.