Además de haberse confirmado la influenza aviar H5 en Bulgaria, también se ha detectado la enfermedad de Newcastle, de la que no se confirmaban focos desde diciembre de 2004. El caso se ha señalado en la región de Blagoevgrad, en el sudoeste del país, en una explotación con 158 aves de corral.

Por otro lado, en Rumania no dejan de producirse casos. Las autoridades han informado que los últimos diez días de enero se han confirmado 57 nuevos casos en los condados de Arges, Braila, Bucarest, Buzau, Calarasi, Caras severin, Dambovita, Giurgiu, Gora, Palomita, Ilfov, Mehedinti, Prahova, Valcea, Vaslui y Vrancea. Los primeros casos se detectaron en Rumania a finales de noviembre pasado, tras 20 años sin focos.