9 de marzo de 2007. La organización UPA ha solicitado a la Consejería de Agricultura con carácter de urgencia que publique una Orden que recoja la modificación del porcentaje de retirada voluntaria en Castilla y León incrementándolo hasta el 50 %.

La petición de la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos viene dada por la situación de caos generada y provocada esta campaña pasada por las extractoras de girasol que operan en el mercado. Debido a las liquidaciones tan bajas en los precios pagados a los agricultores, en los que no se han podido ni cubrir los costes de producción, se hace prácticamente inviable el cultivo del girasol en muchas zonas con vocación girasolera de nuestra comunidad autónoma.

Estamos así pues ante una situación atípica y extraordinaria, en la que urge una actuación especial por parte de la Consejería de Agricultura y del propio MAPA. La forma de actuar de las extractoras y operadores del sector girasol, que ha sido gravemente especulativa y abusiva, requiere de varias actuaciones, y entra ellas está de forma urgente la de permitir al cultivador acogerse a la retirada voluntaria hasta en un 50 %.

Esta situación de acoso y derribo contra los agricultores, que ha supuesto que UPA presente una denuncia ante el Tribunal de Defensa de la Competencia, ha llevado a que miles de productores renuncien a un cultivo histórico y muy necesario en la rotación de cultivos al cereal.

UPA considera absolutamente necesario que la Administración regional y central atiendan nuestras reivindicaciones y publiquen la modificación de forma inmediata del porcentaje de retirada voluntaria, que actualmente es del 10 %, pasándolo al 50 %.

Nuestra organización apela a la responsabilidad de la Consejería de Agricultura para que actúe rápidamente, ya que muchos agricultores de Castilla y León están a la espera de una posible modificación en este sentido para tramitar los pagos compensatorios de la PAC.