El seguimiento de una dieta vegetariana por parte de los jóvenes podría ser la opción más saludable, aunque presenta el inconveniente de un elevado riesgo de desarrollar desórdenes alimentarios, según un reciente estudio realizado por varias universidades norteamericanas.

En el estudio se ha analizado la dieta y parámetros de salud de de 2.156 adolescentes y jóvenes adultos entre 15-23 años, clasificándose los pacientes entre vegetarianos en activo (4,3%), antiguos vegetarianos (10,8%) y resto (85%)

Los vegetarianos presentaron un menor índice de masa corporal y menor tendencia a desarrollar sobrepeso que los no vegetarianos. Si embargo, en los vegetarianos se detectó un mayor riesgo de hábitos alimentarios no saludables, como realizar comidas compulsivas (binge eating). Por otra parte en los antiguos vegetarianos se detectó un mayor riesgo de hábitos extremos como inducción de vómitos o uso de laxantes.