La ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM), Rosa Aguilar, asistió ayer a la entrega a la Comunidad de
Regantes de Lorca de la concesión para el uso de recursos procedentes de la desaladora de Águilas-Guadalentín. El traspaso lo han llevado a cabo la directora General del Agua del MARM, Marta Moren, y la presidenta de la Confederación
Hidrográfica del Segura (CHS), Charo Quesada.

Gracias a esta concesión, los agricultores lorquinos usarán 23 hectómetros cúbicos de agua generados en esta instalación en sus campos y regularizarán su regadío consolidado, más de 11.000 hectáreas, el total que quedaba por
regularizar.

Rosa Aguilar ha destacado que sin la inversión del Gobierno de España de 268 millones de euros en la desaladora de Águilas-Guadalentín, “esta concesión no habría sido posible”. De este modo, la Ministra del MARM ha resaltado que la
desaladora “permite un mayor desarrollo de la agricultura, locomotora esencial de la región, lo que beneficia al turismo, a la industria y, en definitiva, al empleo”.

Asimismo, ha hecho hincapié en que la desaladora beneficia a 130.000 ciudadanos.

La concesión entregada ayer a los regantes de Lorca implica también la regularización de 11.253,92 hectáreas de regadío consolidado en esta zona, unos terrenos de cultivo que ya generaban trabajo y riqueza pero que era necesario incluir en el Plan Hidrológico de la Cuenca del Segura para la seguridad de los agricultores y la propia planificación de la cuenca. Unidas a las 12.116,55 hectáreas ya regularizadas, el regadío lorquino alcanza las 23.370,47 hectáreas de cultivo, mientras que la Comunidad de Regantes de Lorca llegará a los 10.200 comuneros.