El año pasado, más de medio millón (504.002) de hectáreas, una superficie que duplica el tamaño de Luxemburgo, fueron arrasadas por incendios forestales, según un informe preliminar sobre los incendios forestales en Europa, Oriente Medio y el Norte de África 2023 que ayer publicó el Centro Común de Investigación de la Comisión. (JRC).
El informe muestra que los incendios se intensificaron durante el verano de 2023, afectando principalmente a la región mediterránea. Grecia (cerca de Alejandrópolis) sufrió el mayor incendio ocurrido en Europa desde la década de 1980. El cambio climático está haciendo que los incendios forestales sean cada vez más frecuentes. La situación empeorará, según recoge el informe europeo de evaluación del riesgo climático publicado en marzo. Los incendios forestales están afectando cada vez más a áreas que en el pasado no se consideraban regiones propensas a los incendios.
Además, los datos preliminares de los tres primeros meses de 2024 muestran casi el doble de la media de incendios, aunque éstos no tuvieron mayor impacto en términos de superficies quemadas.
El análisis por tipo de vegetación para 2023 revela que el 37% del área total quemada estaba cubierta por arbustos y vegetación esclerófila, caracterizada por hojas duras y gruesas y adaptada a períodos prolongados de sequía, mientras que el 26% (120.000 ha) eran bosques.
Como se mencionaba anteriormente, el cambio climático con la consiguiente sequía y elevación de temperaturas está favoreciendo que aumente los incendios forestales. A su vez, estos incendios provocan las emisiones de ingentes cantidades de CO2, empeorando el cambio climático. Según el informe, los incendios forestales produjeron unas 20 megatoneladas (Mt) de emisiones de CO2, lo que equivale a casi un tercio de todas las emisiones de la aviación internacional en la UE en un año.
Aunque el informe no lo señala, no queremos dejar de mencionar aquí el importante papel de la ganadería extensiva y de los ganaderos en el control de los incendios forestales, que consiguen un doble objetivo, ayudar a evitarlos, con lo que la masa forestal sigue fijando carbono y evitando las emisiones de CO2 cuando se queman.
Los tres peores años de este siglo según la extensión de superficie quemada cartografiada por el Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales (EFFIS) fueron 2017 (988427 ha), 2022 (837212 ha) y 2007 (588388 ha). El informe final de 2023, que integra las contribuciones nacionales, se publicará en otoño.
La Comisión publicó en marzo de 2024 una Comunicación sobre el desarrollo de la resiliencia climática en la UE y la gestión eficaz de los riesgos climáticos . Como parte de la acción inmediata, las medidas exigen una mayor prevención que incluya soluciones basadas en la naturaleza, una mejor preparación gracias a los sistemas de alerta temprana y medios eficientes de extinción de incendios disponibles a través del Mecanismo de Protección Civil de la UE (MPCU) .
Lo peor en comparación es que el CO2 emitido por la aviación es de combustibles fósiles y por tanto un añadido al ciclo natural del C . Lastima que la energía calorífica de los incendios no se utiliza para nada . Lo ideal es hacer un buen uso de las materias combustibles ,cortafuegos , alternancia en los terrenos forestales que evite en lo posible la propagación a gran escala de el fuego, una buena gestión,