La Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía abre desde hoy el plazo de un mes para solicitar las ayudas que respaldan, por un lado, la conexión de las comunidades de regantes, juntas centrales y comunidades generales con Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) o estaciones desaladoras para utilizar las aguas regeneradas en el riego de los cultivos; y por otro lado, para los nuevos regadíos abastecidos con estos recursos. Se trata de las primeras convocatorias del Programa de Desarrollo Rural (PDR) de Andalucía 2014-2020 que apoyan el uso de aguas no convencionales en el regadío y, por tanto, contribuyen a recuperar las masas de agua de las que tradicionalmente se vienen sirviendo las explotaciones agrícolas.
Como recogió ayer el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), el presupuesto global de estas dos líneas de subvenciones asciende a 25 millones de euros (15 millones de euros para nuevos regadíos y 10 millones de euros para conexiones). En ambos casos, las ayudas para la ejecución de obras podrán ascender, como máximo, al 60% del desembolso que realicen los regantes para este fin sin bajar de 25.000 euros de subvención. Sin embargo, la inversión máxima establecida en el caso de proyectos de nuevas instalaciones de riego es de 5 millones de euros, mientras que para las conexiones con depuradoras y desaladoras es de 1,5 millones de euros.
La consejera andaluza Carmen Crespo ha recalcado: “No podemos desdeñar ninguna fuente hídrica”, en referencia a las transferencias, las aguas regeneradas y desaladas. En este sentido, ha lamentado los recortes en el trasvase del Tajo-Segura, del que se benefician 150.000 almerienses en el ámbito del abastecimiento y más de 20.000 hectáreas de cultivo en el caso de los regadíos. Carmen Crespo ha pedido al Gobierno de España que “no se ponga en desventaja a las tierras secas” y ha recalcado que desde Andalucía “decimos no al recorte” porque “no está basado en cuestiones objetivas”.
En cuanto a otras demandas de Andalucía al Gobierno central, Carmen Crespo ha reiterado la necesidad de que la bonificación del agua desalada permita un precio máximo de 30 céntimos de euro el metro cúbico, una cuestión que considera “fundamental no solo para el regadío sino también para el consumo”. Además, ha vuelto a reclamar la activación de la doble tarifa eléctrica para los regantes con el fin de “ayudar a nuestro sector productivo más potente” frente los altos costes de producción.
¿Regar con aguas procedentes de una Estación Depuradora de Aguas Residuales -EDAR- (o sea procedentes del tratamiento de residuos urbanos incluidas las deyecciones humanas y todo lo que se echa por el retrete)?
¿Qué tipo de cultivos podrían regarse con esas aguas? ¿qué plazos de seguridad antes de la recolección y venta para consumo humano?
¿se han valorado los riesgos sanitarios?
Falta información en la noticia, o estamos ante un «bluff» populista.,