El Primer Ministro francés, Edouard Philippe, ha anunciado que quiere que el gobierno central tenga más competencia en la gestión de las medidas de desarrollo rural. Este aumento de competencias conllevaría, por tanto, unas menores competencias de las regiones franceses, por lo que el anuncio no ha sido muy bien recibido por éstas.

En su intervención en el Congreso de Regiones de Francia, Philippe anunció el nuevo reparto de los papeles en la gestión de las ayudas del segundo pilar de la PAC entre el Estado y las Regiones. Ha propuesto que el Estado vuelva a retomar el control de las ayudas de superficie del segundo pilar (agroambientales, ecológicas, zonas desfavorecidas), dejando que el resto sigan a manos de las Regiones. Actualmente, éstas controlan todas las medidas del segundo pilar. Philippe argumenta su propuesta en base a garantizar la unidad de gestión, reducir los retrasos en los pagos y asegurar el calendario de pagos.

El Primer Ministro también avanzó que está a favor de mantener un diálogo trimestral entre el Estado y las Regiones para fortalecer el diálogo y la implementación de políticas comunes. La primera debería tener lugar en octubre sobre el tema de la agricultura.