Las perspectivas de demanda de productos lácteos en al próxima década (2015-2025) son de lo más optimistas, ya que ésta crecerá en un 26% ( o un 2,4% anual). Por tanto, se producirán y consumirán 208 Mt de leche más en 2025, es decir, 8,5 veces la actual producción de Nueva Zelanda, de acuerdo con las recientes estimaciones difundidas por International Farm Comparison Network (IFCN).

La clave de este crecimiento será una mayor población y que cada vez se consumirán más lácteos. Se prevé un crecimiento de la población en casi 1.000 millones de habitantes más en 2025, por lo que se llegará al record de 8.200 millones de habitantes. En cuanto al consumo, se estima un aumento de 13 kg de equivalentes de leche por persona, por lo que se pasará de consumir 114 kg de equivalentes de leche en 2015 a 127 kg en 2025.

El aumento de la producción láctea será posible gracias a un mayor censo de vacas (que pasará de 370 millones de cabezas en 2015 a 405 millones de cabezas en 2025) y a un incremento de los rendimientos (de 2.100 kg/cab a 2.500 kg/cab.).

A pesar del aumento del censo, el número de explotaciones se va a reducir (de 121 millones de explotaciones a 103 millones) debido a que cada vez van a ser menos pero más grandes (de 2,9 vacas/explotación se va a pasar a 3,7 vacas/explotación).

Mientras que la perspectivas de demanda son optimistas, las de precio no lo son tanto. Se prevé un precio medio de la leche de 41 $/100 kg (para leche de 4% de MG y 3,3% MP), lo que supone un aumento un 46% con respecto al precio medio en 2015 (28 /100 kg). Sin embargo, el precio previsto es comparable al precio medio de 40 $/100 kg registrado entre 2007 y 2014.