El consejero de Agricultura de Cataluña Josep Maria Pelegrí se reunió ayer en la sede del consejo comarcal del Pla d’Urgell, con alcaldes, sindicatos, cooperativas y agricultores afectados, para evaluar las consecuencias de la tormenta caída ayer en las comarcas de Lleida y que, acompañada de piedra, ha afectado básicamente cultivos frutícolas y de cereal, entre otros daños, como mobiliario urbano, etc. de municipios de las Garrigues, el Pla d’Urgell, Urgell, la Noguera y el Pallars Jussà, y que, con el tamaño de entre una avellana y un huevo de Guallar, podría haber alcanzado un alcance igual o superior a la del 5 de julio de 2012.

Josep Maria Pelegrí, que se ha puesto en contacto con los responsables de Agroseguro para que comprueben «el daño real registrado en las plantaciones» y agilice los peritajes en la zona afectada para hacer una evaluación rápida de los daños, afectaciones que él ha podido comprobar de primera mano, y ha mostrado su preocupación, especialmente también al tratarse del segundo año consecutivo que se registra una fuerte granizada de estas características, lo que también puede ser muy contraproducente también de cara a la abastecimiento de los mercados. Así, el consejero ha afirmado que, conscientes de ello, Agroseguro tendrá en cuenta que no haya daños a los árboles.

«No nos podemos permitir más daños en piedra y por tanto proponer que se condicione la concesión de ayudas a planes de mejora en la instalación de redes antigranizo, las cuales mejoran la producción y evitan los daños, y ya hay instrumentos financieros para que los agricultores instalen «, ha remarcado Pelegrí, quien, además, ha señalado la posibilidad de que pueda haber otro episodio de granizo en las próximas horas que afectaría más la zona del Segrià oeste.

El consejero también ha avanzado que pedirá al Estado que considere rebajar los módulos del IRPF por la afectación de la piedra, y ha advertido de que puede que cueste justificar los daños para que la fruta aún es muy pequeña.