Una cepa de gallinas, que son ciegas por naturaleza, empiezan antes la reproducción y producen más huevos por ciclo que sus compañeras que ven, de acuerdo con estudio de la Universidad de Guelph (Canadá). Además, las gallinas ciegas son menos agresivas y sufren menos estrés por su interacción con el hombre.
Las gallinas empiezan su desarrollo reproductivo tras notar un aumento de la duración del día. Esto ocurre cuando una mayor cantidad de luz es absorbida por el hipotálamo, que es la parte del cerebro que controla funciones como la temperatura, el hambre, la sed, el ciclo del sueño y la presión sanguínea.
En las gallinas ciegas, la luz actúa de forma diferente. En el estudio se comprobó que mientras la luz estimula directamente el hipotálamo, también inhibe la reproducción cuando se percibe por la retina. Como las gallinas ciegas no tienen retina, solo experimentan la influencia del hipotálamo, que las estimula a empezar a poner huevos antes.
También se comprobó los rayos verdiazules de la luz son percibidos fundamentalmente por la retina, mientras que los rojos atraviesan los huesos de la cabeza y estimulan el hipotálamo. Los verdiazules tienen propiedades inhibitorias mientras que los rojos estimulan la puesta de huevos. En una gallina que ve se producen estos efectos contradictorios, por lo que según la duración del día, pesa más una acción u otra. Así, en días cortos, predomina la capacidad inhibitoria, mientras que en los largos, los rayos rojos predominan y se inicia la madurez reproductiva.
Por el contrario, en gallinas ciegas, al no tener retina, no sufren los efectos inhibitorios de los rayos verdiazules, por lo que empiezan a poner antes, incluso sin que aumente la duración del día.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.