Desde hace meses, el gobierno argentino no deja de realizar acuerdos con el sector de vacuno de carne. Su intención es evitar que suban los precios de la carne al consumo, y así contener la inflación. Por su parte el sector, no quiere verse perjudicado por las acciones del Gobierno.

El acuerdo al que se ha llegado, afecta a la producción, a los precios y mercados, y al procesamiento y distribución, según publica el Boletín Exterior del MAPA.

– Producción: se pondrá en marcha del Plan Ganadero Nacional, dotado con 52 millones de euros. De éstos, 11 millones se destinarán a subvenciones no reintegrables a ganaderos que presenten un plan de mejora de la sanidad animal, de los prados, de la genética y/o de las infraestructuras agrarias. El resto se asignará, de forma directa, al sector de la cría ganadera.

– Precios y mercados: la industria frigorífica mantendrá constantes hasta final de año, los precios ya establecidos para los 12 cortes de carne de mayor consumo popular. El Gobierno se compromete a eliminar toda intervención sobre los mercados de ganado vivo.

Con anterioridad al acuerdo, el precio del kilo vivo de novillo estaba establecido en 0,6€/kg. Este precio originó que, para obtener un mayor valor del animal, se incrementasen las ventas en el mercado negro, donde los ganaderos percibían entre 0,7 y 0,72 €/kg. Para asegurar el normal abastecimiento de carne, los ganaderos enviarán a los mercados y mataderos un número suficiente de animales.

Además, el volumen mínimo total de exportaciones, autorizado para el año 2007, será de 500.000 toneladas de res con hueso.

– Procesamiento y distribución: Revisión y readecuación de la Ley Federal de Carnes para que sea de cumplimiento obligatorio en todas las jurisdicciones y revisión de las normas sanitarias para la habilitación de mataderos e industrias cárnicas.