Mérida, 12 de enero de 2007. La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Extremadura, UPA-UCE Extremadura, ve de forma muy positiva la paralización de la tramitación de los Planes Rectores de Uso y Gestión (PRUG) de las Zonas de Especial Conservación (ZEC) por parte de la Junta de Extremadura. La controversia creada hace necesario dedicar más tiempo a buscar un acuerdo entre todos los agentes afectados por esta medida.

Desde UPA-UCE Extremadura entendemos que la administración regional habilita un nuevo plazo para analizar las alegaciones presentadas a distintos planes de las zonas Red Natura. Desde la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos se han remitido a la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente muchas alegaciones realizadas por agricultores y ganaderos afectados por los planes y desde las distintas zonas de la región; alegaciones que esperamos que en este plazo podamos discutir y solucionar.

Los agricultores y ganaderos estamos convencidos de que hay que compatibilizar la actividad agraria con el mantenimiento del medio ambiente y que eso debe ser perfectamente viable y posible para todas las partes. El medio natural que conocemos ha sido posible mantenerlo en gran medida debido a la realización de la actividad agraria y ganadera que tradicionalmente se ha llevado a cabo en estas zonas de la región. Al ser esto así, desde UPA-UCE Extremadura creemos que es justo el reconocimiento de la función vertebradora del territorio que los agricultores y ganaderos realizan a través del mantenimiento de la actividad agraria; y que ese reconocimiento debe aparecer en los Planes de uso de la Red Natura.

Esta organización agraria considera que hay que poner en marcha mecanismos que compensen las restricciones de uso que las zonas de Red Natura tienen para la actividad productiva. Si una nueva regulación impone restricciones a un sector, ese sector debe ser compensado por ello. Eso ocurre en todos los ámbitos económicos.

Esperamos que este nuevo plazo sirva para que a través del diálogo se llegue a un acuerdo entre todos los implicados e interesados: conservacionistas, agricultores y ganaderos y administración con el fin de conciliar un Plan Rector de Uso y gestión que no produzca perjuicio a nadie y que sea apoyado por todos.