Se ha confirmado un primer caso de Encefalopatía Espongiforme Bovina (EEB) en Suecia. El animal afectado es una vaca de 12 años de edad, que fue sacrificado para su destrucción por enfermedad, por lo que tuvo que ser analizado.

Suecia gozaba de una especial derogación por ser el único país de la UE con un nivel 2 de riesgo de EEB (bajo riesgo). Por este motivo, en lugar de tener la obligación de analizar todos los animales sacrificados de más de 30 meses (como está vigente en el resto de los países), solo tienen que analizar un muestreo. Han venido analizando unos 10.000 animales sanos cada año. No obstante, si tienen que cumplir, como los otros Estados, el análisis de todos los animales caídos o enfermos. La Comisión Europea está replanteándose modificar esta derogación.

Se ha procedido a investigar la fuente de contaminación. Todos los descendientes y cohorte de la vaca infectada están siendo seguidos y sacrificados, para evitar que entren en la cadena alimentaria.