La empresa azucarera Danisco, la principal en los países escandinavos y una de las mayores de la UE, anunció ayer el cierre de tres fábricas en la próxima campaña, con el fin de poder mantener la actividad de forma competitiva en el nuevo escenario tras la Reforma de la OCM, según la compañía.

Se trata de las fábricas de Assens (Dinamarca); Köpingebro (Suecia) y Salo (Finlandia) que cerrarán tras moler por última vez en la campaña de 2006. Por otra parte la empresa amortizará una parte de su cuota azucarera en Suecia y Finlandia, ofertándola a la Comisión Europea. Por otra parte se añadirá cuota adicional la fábrica de Anklam, en Alemania, en la se aumentará la producción.