La cosecha de cereales en Inglaterra y Gales de esta campaña se estima en 15,8 millones de tn de trigo y 6 millones de tn de cebada, según una encuesta realizada por el sindicato agrario NFU. Esta campaña ha sido de abundante producción, pero muy problemática debido al clima muy lluvioso del verano, que ha hecho que la mayor parte de la recolección se ha hecho con retraso, durante el mes de agosto e incluso en septiembre, y en muchos casos con graves dificultades.

Estas estimaciones coinciden sensiblemente con las oficiales, recientemente publicadas por el Departamento de Agricultura (DEFRA) que estima 22,3 millones de tn, un 4% más que la campaña anterior; de los cuales 15,7 millones de trigo y 5,9 de cebada,.

Los rendimientos medios han sido de 7.9t/tn en trigo; 5.8t/tn de cebada y 2,4 t/ha de avena. La calidad ha sido en general mala o muy mala debido al clima lluvioso, lo que ha hecho que una mayor proporción de trigo tenga como destino principal la alimentación animal, presionando los precios a la baja en este mercado.

El Reino Unido es un país normalmente excedentario en cereales, siendo España uno de los países principales a los que exporta, principalmente cebada y trigo forrajero.