Valencia, 2 de octubre de 2004. La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) ha negado “categóricamente” el incremento del cultivo del arroz en la Comunidad Valenciana, ya que históricamente siempre se ha mantenido en torno a las 16.000 hectáreas.

La organización agraria ha querido aclarar que ante el incremento de las ayudas en la última reforma de la OCM de 2003, muchos arroceros que nunca habían solicitado la ayuda debido a la complejidad burocrática que ello suponía y a la escasa subvención que percibía, este año han decidido pedirla, lo que no quiere decir, bajo ningún concepto, que hayan cultivado más, sino que ha aumentado la superficie solicitada. Mientras, otras comunidades autónomas como Extremadura o Aragón, no sólo siguen aumentando la superficie solicitada, sino también la cultivada.

De hecho, y a modo de ejemplo, hay que destacar que en algunas poblaciones existen parcelas que en otros años han sido cultivadas, y, por el contrario, en la presente campaña se han abandonado por la baja rentabilidad del cultivo del arroz, lo que significa que la superficie real cultivada ha disminuido, así como el precio de compra.

En la presente campaña, los arroceros valencianos tendrán una penalización de alrededor del 5% por haber solicitado 15.137 hectáreas, lo que supondrá que la ayuda ascenderá a 1.061 €/hectárea. No obstante, si no se hubiera modificado el sistema de penalización y regionalización de las ayudas, hubieran sufrido una penalización del 93%, que se hubiera traducido en pérdidas para el sector de más de 15 millones de euros.

“Este hecho nos hace ver, una vez más, que es necesaria la regionalización de la superficie del arroz, ya que nuestros agricultores ni deben ni pueden hacer frente a la expansión del cultivo de otras regiones”, afirmó el presidente de AVA, Cristóbal Aguado, para quien “cada comunidad autónoma ha de ser responsable de la superficie que cultive y atenerse a las consecuencias que ello conlleve”.